miércoles, 16 de diciembre de 2009

Titular de la Dinac confirmó que intentó detener vuelo comercial

El presidente de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil, Ceferino Farias, reconoció a la 970 AM que solicitó el pasado 24 de noviembre a la directiva del Transporte Aéreo del Mercorsur, detenga el despegue para que el Jefe de Inteligencia del Ministerio del Interior, José Amarilla y otros funcionarios, puedan abordar la aeronave tras perder el vuelo por haber llegado tarde al aeropuerto.
El Jefe de Inteligencia del Ministerio Público, José Amarilla al tiempo de reconocer que solicitó la intervención de la Dinac para que detenga el vuelo comercial, justificó que se trató de un caso de emergencia relacionado a las investigaciones en torno al secuestro de Fidel Zavala. Desmintió que haya amenazado a funcionarios ante la negativa de no detener la aeronave.
En tanto el Ministro del Interior, Rafael Filizzola, aseguró que no se ejerció presión alguna sobre los personales del Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi para detener el vuelo comercial. Aclaró que se consultó acerca de la posibilidad de que los funcionarios de seguridad puedan abordarlo, atendiendo que la aeronave aún se encontraba en la manga.

Fuente: www.lanacion.com.py

Jefe de Inteligencia provoca incidente con un avión de TAM


José Amarilla intentó, a través de la Dinac y del Ministerio del Interior, evitar el despegue de un avión de TAM porque llegó tarde. Hubo amenazas y hasta un intento de bloquear con vehículos la pista. La aerolínea reclamó una investigación.

Eran las 10.50 del 24 de noviembre cuando el vuelo 706 de TAM, con destino a Ciudad del Este-San Pablo, inició el rodaje de la cabecera de la pista del aeropuerto Silvio Pettirossi para tomar impulso y despegar. De repente, la radio del piloto recibe un mensaje desde la torre de control.
La voz del otro lado preguntaba si había posibilidades de volver a la zona de embarque para alzar a tres pasajeros. Eran el jefe de Inteligencia del Ministerio del Interior, José Amarilla; el comisario Luis Bernal y el abogado Óscar Tuma (padre), quienes llegaron 15 minutos después de que se cerrara la zona de embarque.
El capitán de la aeronave responde a la consulta de la torre que hablará con los directivos de TAM. Quince minutos después, el piloto confirma que el avión debía despegar porque tenía un horario de vuelo que cumplir.
"Ningún avión, una vez iniciado el proceso de despegue, puede volver a la zona de embarque, por uno, dos, o veinte pasajeros", explica el presidente de la Federación de Trabajadores Aeronáuticos, Osvaldo Salinas, quien confirmó el incidente que llegó a ÚH.
ORDEN SUPERIOR. Las amenazas en contra de TAM no se hicieron esperar. El jefe de seguridad de la aerolínea, René Zotti, quien no estaba dispuesto a romper las reglas internacionales establecidas, así como el protocolo de la empresa, dejó sentado a José Amarilla que el avión no podía retornar. Oliendo problemas, las autoridades de la aerolínea se pusieron en contacto con sus empleados en Ciudad del Este, pidiéndoles que estén atentos al vuelo porque tuvieron amenazas de que no se permitiría aterrizar a la aeronave en el aeropuerto Guaraní.
REACCIÓN. Al recibir la negativa del piloto, desde la torre de control le retrucan que "por orden superior" debía suspender la partida. Desde la nave preguntan a qué orden se refería y le responden: "Por orden del director de la Dinac y del Ministerio del Interior".
Efectivamente, la orden provino del titular de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), Ceferino Farías, quien se comunicó con funcionarios del aeropuerto para pedir que el avión se detuviese. Farías minimizó el incidente y negó presión alguna hacia TAM. "Yo tomé intervención como una cuestión de cortesía hacia compañeros de otra institución", se excusó el funcionario luguista.
Al ser consultado quién lo llamó, el director de la Dinac expresó que fue el jefe de destacamento policial del aeropuerto, comisario Alfredo Amarilla. En ningún momento Farías quiso comentar a pedido de quién el comisario tomó intervención en el caso. Sin embargo, testigos sostienen que José Amarilla presionó al encargado a cargo de la seguridad del Silvio Pettirossi para que este comunicara a Farías que no era cualquier pasajero el que se quedó sin abordar el avión, sino que se trataba del jefe de Inteligencia. "Dígale que es un asunto de Estado", arengó el jefe de Inteligencia al comisario, de manera que este trasmitiera la orden al jefe de la Dinac.
Esta versión tomó forma cuando Farías expresó a ÚH, al ser consultado sobre su intervención, que la Dinac no tiene problemas de intervenir cuando hay una situación oficial, es decir, que tenga que ver con el Gobierno. "Administramos situaciones cuando se trata de un pasajero que debe ir (fuera del país) por intereses de Estado", añadió. Agregó que por cualquier persona hubiera hecho lo mismo, insistiendo que no sabía quién era la persona por la cual él se encontraba gestionando que un avión Airbus 320, con 89 pasajeros, no despegara hasta alzar al "desconocido" pasajero. "Solo me dijeron que eran personas del Ministerio del Interior", insistió Farías. Sostuvo que el contacto que realizó solo fue con los funcionarios de tráfico "y no presioné a nadie".
OBSTÁCULOS. Salinas manifestó que el subdirector de seguridad del Pettirossi, Isabelino Sosa Farías, intentó obstaculizar la pista de despegue con dos camionetas. Según el relató el piloto civil, los propios funcionarios se negaron a seguir las directivas por la peligrosidad que eso representaba y descartaron el pedido. Además de configurar violación de reglas internacionales.
TAM solicitó a la Dinac la investigación de los hechos.